
Miradas Secretas Hoy y Leonardo
Giulia Calvanese, Milán 2019
Desde siempre mi busqueda artistica ha estado orientada a representar aspectos que parecen trascender la realidad sensorial.
En mis rostros, no busco la perfeccion de formas y proporciones ni menos una semejanza de un tipo de retrato, es mi deseo que estos puedan expresar atravez del lineamiento, movimientos emocionales que se intraveden a travez de los mismos.
En aquellos considerados por errores abstractos, busco una representacio de una realidad existente pero dificil de percebir con los cinco sentidos. Pueden ser definidos como intentos de representaciones de nuestra interioridad humana y del deseo universal hacia el ascenso que alberga en nuestro profundo.
Es importante para mi, a este punto de mi busqueda; confrontarme con Leonardo da Vinci, catalogado el numero 1 entre los grandes indagadores de los movimientos del ànimo.
Mi conversacion con el se desarrola en este lado instrocpectivo puramente la tecnica del sombreado. En los cuadros que he realizado, busco comprender la manera de accionar de Leonardo para crear su renombrado sombreado, tomand por ispiracion la gama de colores del pintor Vinciano.
Encuentro en modo singular como ésta tecnica ayuda a resaltar el concepto de la realidad emotiva que exprime a travez de pasajes y tonalidades, viendo al mundo en una total y maravillosa esfumatura al confin del conocimiento sensorial y espiritual.
Los colores de los rostros leonardesqui si bien concuerdan con la teoria de la simbologia cromàtica, que de un tiempo a esta parte me ha llevado a simplificar mis paletas de color y reducir solo en dos colores fundamentales: la tierra de Siena quemada y Ocre romana-oro.
La tierra de siena (y su extensa tonalidad del color marron hasta el bristo (usado por Leonardo mismo) y al negro), entra en un contexto figurativo terreno, material sensorial y corporeo.
El color ocre romano y el oro en especial, me son utiles para dar luz a mis rostros, como simbolos de la luz divina y continuacion de la parte espiritual. Oro es luz espiritual: simbolicamente se trata de una maquina que encuentra ejemplificacion del altar gòtico, a la luz de los iconos ortodoxos, y en busqueda alquimica del oro.
Las sombras de los rostros que pinto no son solamente partes de la esencia de luz, si no simbolos de una parte de materia, cuerpos y conocible atravez de los cinco sentidos del objeto che representa.
Las luces ademas de iluminar los lineamientos del rostro en manera vivaz, gracias al pigmento metalico , dan la sensacion que una persona no es solo cuerpo terreno, si no tambien una parte espiritual que se anida en éste último y dà vida.
Esta parte no es asi tangible de individuar atravez de los sentidos, pudiendose persibir solamente con estos.
La mia decision de dejar algunas partes de luz en un nivel de “suave diseño que se persibe solamente”, viendo asi mejor las caracteristicas de nuestra parte espiritual. Llego asi, de una visual tecnica a un ribaltar de la tradicion de la pintura academica, dando a la luz un rol primordial para definir la justa iluminacion de cuerpos y volumen.
Para finalizar, la conversacion artistica con Leonardo da Vinci, a distancia e cinco siglos este año de su muerte, no se da por medio de una copia o atravez de una nueva revision de algunas de sus obras, si no por medio del estudio de su tecnica y su modo de manifestar las emociones, las cuales vienen tejiendo la mia vision personal del mundo y de mi busqueda artistica.
Traduction de Jubicsa Pastor Juàrez, Milàn, Italia